NOBEL DE FÍSICA

No es fácil optar al Nobel, se necesita muchos años de estudio y… un golpe de suerte. Uno como el que se dio Anacleto Ruipérez en el dedo meñique con la pata de la mesilla de noche y que le dejó ver: primero las estrellas más cercanas, luego la Vía Láctea desde fuera y, por último, el primer destello del nacimiento de un agujero negro; fenómeno que fue confirmado por el observatorio astronómico del desierto de Atacama y que le puso en la órbita de la Academia sueca.

Aunque hoy todas sus preocupaciones se centran en encontrar unos zapatos que le permitan: A) Cumplir con el rígido código de vestimenta.

  1. B) Albergar con holgura el mamporro deforme que arrastra a un lado del pie derecho desde que realizó el feliz descubrimiento.

EUREKA

Después de un día en los que uno preferiría no haber salido de la cama, llenó la bañera y se sumergió en ella.

Al ver cómo el agua que desalojaba su cuerpo era directamente proporcional al nivel de frustración que la sacudía, no pudo más que empezar a sentir admiración por la Física, aunque ella siempre hubiera sido de letras.

 

 

Ecuación

Ahora mi corazón
partido por un rayo
con ½ necrosado
y el otro ausente de esperanza,
busca en ti, oh, tú,
el apoyo que le falta.
Ecuación milagrosa
que tiende a infinito
¿por qué tuviste que mirarme
creando tres incógnitas
imposibles de resolver?
¿por qué siento lo que siento?
Si la solución a mis problemas
siempre fue raíz cuadrada de pí.