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🙂 ¡Cualquier cosa! Y si un salmón se propone que pase, entonces… ¡Vaya martes! 😉
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Ya sabes, en Isla Imaginada pasan cosas de lo más extrañas.
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Pero siempre fascinantes y divertidas 😉
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Bueno, peor es que le hubiese caído un melón…
Y puestos a decir, peor aún un ajo. Acompañado de aceite de oliva, su poquito eneldo y toque de tomillo. Peor para el salmón, mejor para mí. Dónde va a parar.
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Yo pensé algo parecido también. Me dije «¡Qué suerte que no le cayó un coco en la cabeza!». jajaja
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Tojuro que, cuando estaba escribiendo el comentario, a última hora cambié «coco» por «melón».
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Menos mal que el cuento no dependía de vosotros. 😉
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Oyeeeeeeeee. ¿Qué es eso de guisar al salmón como si fuera un pez cualquiera? 😂😂😂😂
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Es que no es un pez cualquiera. Es el que más me gusta. Seguido muy de cerca, eso sí, de la caballa y la trucha. Los mejores, a la plancha.
Además, ya le había caído un ajo encima…
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