AGITADO
Era una de esas historias que viajan de boca en boca; de esas historias que a unos espeluzna y a otros embelesa. Lo tenía todo: un dragón, una princesa, un caballo, una armadura, un doncel, un pozo y una moraleja.
De tanto ir y venir, se le desbarataron los personajes y así, al final de los tiempos: el pozo, que montaba en un carro tirado por el doncel y una princesa vestida con armadura, logró salvar al dragón de una moraleja custodiada por el caballo.